jueves, 29 de mayo de 2008

Ídolos caídos

Sonreí. No podía creer lo que veía.
-¿Cómo estás?
-Hola Manuel, tanto tiempo!
El amor de tu infancia, atlético, que prometía ser un futbolista estrella, repartiendo en el súper, hecho un gordo feo… ¡Qué dolor!
Ver a los “ídolos” de la adolescencia hechos unos escrachos, útiles para nada, vagando en la plaza…
Confieso que sentí un poquito de alegría vengativa… un poquito sí.

1 comentario:

Anonetoy dijo...

Y viceversa: también hay de las feas que se emprolijaron. Parece ser que la imagen lo es todo. O al menos, casi todo.